jueves, 3 de enero de 2013

Para el 2013


La noche del 31 de diciembre recorriendo las calles de Santiago contemplé en los bares el ánimo de las gentes saboreando la última copa de vino antes de ir a casa a cenar.
De inmediato recordé las personas que esa noche nada tendrían que celebrar porque lo han perdido todo.
Imaginé a unos durmiendo debajo de los puentes y a otros buscando un lugar calentito para pasar la noche.
La situación económica en 2012 nos fastidió a todos. Muchas familias perdieron sus casas, sus empleos y la ilusión de que sus circunstancias mejoren.
En las situaciones más adversas comprendes lo vulnerable que es la humanidad, un día lo tienes todo y al otro todo aquello que conseguiste con esfuerzo se ha esfumado y no me refiero solo a lo material.
Esperemos que este año que inicia el panorama económico y social de este país mejore un poco, que los políticos dejen de ganar menos y trabajen más, ya es hora de que también pongan de su parte; ojalá este año no haya tanta tragedia humana como el año pasado: desahucios, suicidios por los desahucios, miseria, pobreza y recortes.
Muchos buenos deseos y propósitos para este año
PD: la imagen de este post hace parte de los regalos que recibí el año pasado: mi sobrino Isaac.                                              



2 comentarios:

Unknown dijo...

hermoso esta ese bebé, otro mas de la colección para la tía

A mi aire dijo...

Ese es otro perrito, lo dicho toca ampliar la perrera.
Jajajjajaja