Transcurrían
los primeros meses del año 1973 y escasamente en los hogares de las zonas más
apartadas de Colombia había un radio transistor que funcionaba con baterías. La
radio era el único medio de comunicación en el que escasamente se escuchaba la programación
de la Radiodifusora Nacional.
Quienes nacimos en esa década, muy lejos de donde se generaban los
avances tecnológicos de la comunicación, todavía recordamos el día en que llegó
la luz eléctrica al pueblo. Innumerables veces jugué con mis hermanos y primos
en los postes. El tiempo que estuvieron
tendidos en el suelo, con una tabla nos balanceábamos de lado a lado. Me imagino que todo iba despacio, porque además de las
zanjas, los postes estuvieron unos cuantos meses sin instalar en las puerta de las
casas. A varios amigos en Europa les cuento esta historia y me dicen que cuando ellos nacieron ya había luz eléctrica. Pues yo la vi llegar y eso me llena de orgullo.
Al advenimiento de la energía
eléctrica le siguió la televisión, primero en blanco y negro. La primera casa
en la que se hicieran con un aparato se convertía en la casa comunal. Familias
enteras reunidas en torno a ella, como si fuera el último invento de nuestros
días.
Cuando pensábamos que lo habíamos visto todo, irrumpieron los
ordenadores y con ellos la internet, los chat, las videoconferencias, la
educación virtual. Ya no nos bastaba la pequeña “caja mágica” en color para
descubrir el mundo. El mundo nos había descubierto a nosotros ofreciéndonos la
posibilidad de comunicarnos, educarnos, informarnos, divertirnos a través de
las Tecnologías de la Información y la Comunicación. TIC.
Las nuevas tecnologías han transformado nuestras vidas, lo que hacemos,
pensamos, como nos comportamos, lo que consumimos. Lo mismo ha ocurrido en la
educación con el cambio y actualización del currículo, equipos y formación del
profesorado para que la escuela no se quede rezagada ante los cambios tecnológicos.
Aunque se ha avanzado en unos aspectos, la incursión de las nuevas
tecnologías ha significado para las familias y los profesores nuevas
responsabilidades y nuevos retos. Temas como el acoso y la violencia escolar
son más visibles, la protección de la privacidad e integridad de las personas, especialmente
de las niñas y niños nos altera y nos preocupa como también la inclusión y la calidad de la educación (virtual o no), temáticas que nos corresponden a todas y todos.
Cuatro décadas y unos cuantos años han pasado y las experiencias adquiridas en el ayer no riñen con lo tecnológico de hoy. Una y otras confluyen y la vida sigue, debe seguir, como este blog que hay veces me abandona o lo abandono yo. Pero aquí estamos.
Cuatro décadas y unos cuantos años han pasado y las experiencias adquiridas en el ayer no riñen con lo tecnológico de hoy. Una y otras confluyen y la vida sigue, debe seguir, como este blog que hay veces me abandona o lo abandono yo. Pero aquí estamos.